La Comunidad de Madrid ha anunciado una inversión de 6,5 millones de euros destinada a impulsar la formación de nuevos conductores profesionales, duplicando el esfuerzo económico del año anterior para hacer frente a la escasez de personal cualificado en el transporte por carretera. Con esta nueva dotación, se facilitará a 1.200 madrileños el acceso a los permisos C y D, así como al Certificado de Aptitud Profesional (CAP), a través de ayudas directas que reducirán el coste formativo en 1.200 euros por persona. Esta segunda fase del plan vuelve a apoyarse en los centros de formación y autoescuelas, que serán los encargados de aplicar el descuento directamente a los futuros alumnos.
Durante la presentación institucional celebrada el 1 de diciembre, la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo destacó el impacto positivo de la primera edición, que recibió más de 10.000 solicitudes en apenas una semana. Aunque finalmente se concedieron 3.000 bonos, solo 1.600 alumnos completaron la obtención de los permisos, una cifra que la Administración espera mejorar reforzando la coordinación con las autoescuelas para evitar el abandono formativo. La Consejería recordó además que el plan persigue un doble objetivo: facilitar empleo a quienes buscan una salida profesional estable y responder a la necesidad urgente de personal cualificado en el transporte de mercancías y viajeros.
Desde AETRAM, se valora muy positivamente esta iniciativa, ya que supone un impulso directo para paliar el déficit de conductores que afecta especialmente al transporte de viajeros en autocar, un sector clave para la movilidad, el turismo y los servicios escolares y laborales en la Comunidad de Madrid. Estas ayudas no solo ampliarán la incorporación de nuevos profesionales, sino que permitirán rejuvenecer la plantilla, mejorar la continuidad del servicio y reforzar la competitividad de las empresas. Para el tejido empresarial del sector, esta medida representa una oportunidad real de garantizar la calidad y seguridad del transporte, al tiempo que mejora el acceso de los jóvenes a empleos estables y de alta demanda.
