¿Desea recibir notificaciones de www.aetram.es?
X

El absentismo laboral un problema grave para el Transporte

Según el último Informe Trimestral de Randstad (datos correspondientes al primer trimestre del 2023) el sector del transporte terrestre es uno de los que más sufre el absentismo laboral en España. La investigación llevada a cabo por esta consultara, abarca un total de 79 subsectores, y concluye que en promedio, y para el conjunto de la economía española durante el primer trimestre de este 2023, cada día un total de 1.290.244 personas no acudieron a su puesto de trabajo.

Estos datos ponen de manifiesto que en España el nivel de absentismo ha provocado la pérdida de un 6,3% de las horas pactadas, mientras que el absentismo por IT (incapacidad temporal, con baja médica) ha supuesto la pérdida de un 4,9% de las horas pactadas. Por tanto, se puede contar con una aproximación al volumen de trabajadores que se ausentan de su puesto de trabajo si se tiene en cuenta que en el primer trimestre de 2023 el número de ocupados según la Encuesta de Población Activa (EPA) ascendía a 20,45 millones de personas. En dicho caso, un 6,3% de absentismo equivale a que, en promedio, cada día un total de 1.290.244 personas no acudieron a su puesto de trabajo, de las cuales un total de 992.078 personas se encontraban de baja médica durante el primer trimestre del año.

En el caso del transporte terrestre de pasajeros y mercancías el absentismo se sitúa en el 6,6%, por encima del 6,3% del promedio de los sectores, y con la circunstancia añadida de que es uno de los pocos sectores donde además ha crecido en el último año, concretamente un 0,4%.

El informe regionalmente también apunta a que en ciertas comunidades autónomas el absentismo es más grave, como en País Vasco (8,7%), Galicia (7,3%) y Cantabria (7,2%). Mientras que en Baleares (4,8%), La Rioja (5,1%) y Madrid (5,6%) el problema, aunque relevante, no tiene la misma magnitud que en otras comunidades.

El absentismo laboral -la ausencia del trabajador de su puesto de trabajo cuando estaba prevista su presencia- se configura por tanto como un problema grave para las empresas españolas, con un impacto directo sobre la productividad y los costes empresariales, lastrando asimismo su competitividad.